Diario Reforma
Las redes fantasma son los desechos de plástico más letales para los animales del mar, advierte un reporte del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por sus siglas en inglés).
Las artes de pesca abandonadas, perdidas, o descartadas, son consideradas redes fantasma, que componen por lo menos el 10 por ciento de la basura marina, señala el informe “#NoMásRedesFantasma: la forma más letal de plásticos marinos”.
En total, cada año terminan en el océano entre 500 mil y un millón de toneladas de equipo de pesca. A nivel mundial, todas las especies de tortugas marinas han sido afectadas por este tipo de residuo, al igual que dos de cada tres mamíferos del mar y la mitad de las aves marinas.
En México, el declive de la vaquita marina es el ejemplo más conocido de los daños de las redes fantasma, que representan su mayor amenaza, junto con las redes ilegales, según el documento. Las vaquitas marinas se enredan de manera continua en redes de enmalle abandonadas, que son utilizadas para capturar a la totoaba, un pez con un buche que puede alcanzar un valor de hasta 8 mil 500 dólares por kilo en el mercado negro.
Jorge Rickards, director general de WWF México, explica que las redes fantasma son uno de los problemas que aquejan al Alto Golfo de California, hábitat de la vaquita marina, una especie que está en peligro crítico de extinción.
Si bien las redes abandonadas causan el ahogamiento de aves, mamíferos y reptiles, los peces e invertebrados también pueden quedar atrapados y heridos en estos equipos de pesca, donde son más vulnerables a convertirse en presa de otros animales.
WWF quiere recabar más de 2 millones de firmas para impulsar la creación del Nuevo Tratado para Combatir la Contaminación Marina por Plásticos, iniciativa que busca desarrollar un pacto internacional para luchar contra la polución de plásticos en el océano.