De enero a agosto del presente año, en Quintana Roo se han cometido 182 delitos contra la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos.
Luces del Siglo/Felipe Villa
De acuerdo con la carpeta informativa Tráfico de Armas en México, elaborada por el Centro de Estudios Sociales y de Opinión Pública (CESOP) de la Cámara de Diputados, Quintana Roo ha superado en tráfico de armas a entidades con índices históricos de mayor uso ilegal de armas de fuego.
Son casos como el de Durango, que en el periodo presentó 65 violaciones a la ley en la materia; Morelos, con 116; Nuevo León, 151; Hidalgo, 152, o San Luis Potosí, con 139. Los primeros lugares en delitos contra la Ley que regula el tráfico y posesión de armas de fuego son Baja California, con 906; Sonora, 787; Jalisco, 695; Guanajuato, 629; Chihuahua, 593; Tamaulipas, 589, y la Ciudad de México, con 558. El documento identifica tres principales rutas de abastecimiento ilegal de armas que cruzan México provenientes de Estados Unidos.
En el caso de Quintana Roo también hay un abastecimiento marginal de armas, del 2 por ciento, que ingresan por la frontera sur, pues la “inestabilidad del pasado reciente en Centroamérica favoreció el aumento de armas” en el estado.
En lo que va del año, el 36.5 por ciento de todos los delitos cometidos en la entidad se han perpetrado con algún tipo de arma. Lo anterior indica que hay mayor disponibilidad de artefactos de fuego entre la población y entre la delincuencia.
En la entidad, se consigue un fusil de asalto AK-47, conocido como “cuerno de chivo”, entre mil 500 y 3 mil dólares, por ejemplo. La escasa disponibilidad de armas en Quintana Roo hasta hace algunos años mantuvo a la entidad con pocos casos de aseguramiento y recuperación de pistolas, revólveres y fusiles de asalto.
Entre el año 2000 y 2019 sólo se confiscaron en la entidad 359 armas cortas y largas, señala el estudio. A nivel mundial, México es el sexto país con mayor número de armas. Se estima que hay 15 millones de armas de fuego en circulación en todo el país. Más del 95 por ciento provienen de Estados Unidos.
Por ello a inicios de agosto de 2021, el gobierno de México demandó por daños a fabricantes y distribuidores de armas de ese país. El documento consigna que, en su argumentación, el gobierno mexicano sostiene la existencia de “actos negligentes cometidos por las empresas ligadas al comercio de armas en Estados Unidos, que han fomentado el acceso a organizaciones delincuenciales de armas de alto poder como las que han sido utilizadas en diferentes ataques masivos y en múltiples incidentes de violencia en México”.
La demanda civil interpuesta por México busca que las empresas demandadas compensen a los mexicanos por los daños causados por sus prácticas negligentes. Asimismo, que “desarrollen e implementen estándares razonables verificables para monitorear y disciplinar a sus distribuidores”.
Entre los demandados se incluyen siete fabricantes, cuyas armas se recuperan con más frecuencia en actos delictivos en México: Smith & Wesson, Beretta, Century Arms, Colt, Glock, Ruger y Barrett.
