Ante la pérdida del poder adquisitivo por los elevados precios, las compras a granel de algunos alimentos como arroz, frijol, lentejas y habas, entre otros, han adquirido mayor relevancia.
En México, el 91.5% de las familias adquiere productos a granel, de acuerdo con una encuesta aplicada este mes por Kantar, una firma de análisis de datos. Del total de los consultados, el 63% refirió que adquiere productos sueltos por el precio, y otro 49% apuntó que dicho formato se adapta a sus necesidades.
“Granel es un formato que tiene muchas ventajas porque el comprador puede elegir el gramaje que se puede llevar según el uso que le va a dar o los integrantes que haya en su familia, pero lo más importante, es según el desembolso que quiera hacer, esa es la gran ventaja”, explicó Lilia Valdés, directora de servicio a clientes de la división Worldpanel de Kantar México.
La inflación en México llegó a 7.99% en junio y la tasa para el caso de los alimentos procesados se ubicó en 11.84% y para los productos agropecuarios en 15%. Esto se da en un contexto en el que persisten las irrupciones en las cadenas globales de proveeduría y el surgimiento de la invasión rusa a Ucrania, lo que ha impactado los precios finales.
Ante dicho panorama, los consumidores se enfrentan al dilema de comprar menos productos o buscar alternativas más económicas.
“Para mantener el volumen (de los alimentos porque) ya no puedo sacrificar volumen o no puedo comprar menos unidades porque las necesita mi familia, lo que hacen los compradores es migrar a marcas económicas, a las marcas propias o incluso a formatos de granel, que de alguna manera pueden jugar con el desembolso que quiera hacer”, añadió Valdés.
Las compras a granel ya no son exclusivas de tiendas especializadas ni de mercados populares, sino también en las tiendas de autoservicio que abren la posibilidad de que sus clientes hagan sus compras de manera personalizada, como se observa en el Zorro Abarrotero, además de la Central de Abasto, y en establecimientos como Soriana y Neto se ofrecen alimentos para mascota en este formato.
“Hoy también vemos que los retailers y los diferentes canales hacen este esfuerzo para ajustarse a las tendencias. En los autoservicios puedes también ver cómo hay un pasillo en que puedes servir en bolsita lo que necesitas, lo pesas y pagas precisamente eso”, añadió Valdés.
Las ventas a granel ya no solo cubren alimentos como granos básicos, sino también productos de limpieza del hogar. Además, en este tipo de compras los consumidores se ahorran el precio del empaque, apunta el presidente de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes, Cuauhtémoc Rivera.
Añadió que los productos ‘sueltos’ pueden ser entre 15% y 25% más económicos que mercancías empaquetadas, un comparativo sujeto a variación en función de la calidad de los productos.
“La gente busca comprar a granel porque encuentra mejor precio, porque compra la cantidad que va a consumir y tiene mayor control de su consumo, y porque evita el costo de los empaques, en cualquier presentación que venga, el cartón, el vidrio, y eso baja el costo”, refirió.
Sobre los costos de empaques, añadió que la inflación también golpea el embalaje de los productos principales, de tal manera que encarecen aún más la mercancía final que se les ofrece a los consumidores.
El señor Ismael, quien es dueño de una tienda de abarrotes, comparte que las ventas a granel son más redituables que los productos empaquetados, sin embargo, apuntó que en sus ganancias no observa un aumento significativo, ya que los clientes han reducido las cantidades de productos que adquieren.
Katia, quien es ama de casa, comparte que su predilección por las compras a granel son los precios, pero siempre procura adquirir unidades de medida completas, aunque implique un mayor desembolso. 24 HORAS/Jessica Martínez