Chilpancingo, Guerrero
Obispos que comprenden municipios de Guerrero, Michoacán y Estado de México declararon, a través de un comunicado, que con la violencia que se vive en estas regiones pareciera que hay un secuestro colectivo
“Se nos ha secuestrado colectivamente”, sentenciaron.
“La situación de inseguridad y violencia que sigue imperando en los estados comprendidos por nuestra Provincia Eclesiástica nos interpreta sobre nuestros esfuerzos para construir la paz, pues está provocando empobrecimiento económico, cultural, ético y político”, dicen los prelados que integran la Provincia Eclesiástica de Acapulco.
Firman la proclama los Obispos Dagoberto Sosa, de Ciudad Altamirano; José de Jesús González Hernández, de Tlapa; y Joel Ocampo, que comprende la diócesis de los municipios de Michoacán, Huetamo, San Lucas y Tequicheo, además de las demarcaciones mexiquenses de Tlatlaya, Ametepec, Tejupilco y Luvianos.
Los Obispos hicieron un llamado a las autoridades civiles para que no se dejen atrapar por la indiferencia y la intimidación y actúen con firmeza y en base a la ley para evitar la impunidad de quienes pretenden someter a su imperio individualista y destructor a pueblos enteros.
“La sociedad al verse desprotegida experimenta cansancio, frustración, desesperación y hacen cercano el impulso a huir o defenderse por sí mismos”, dice la proclama que hacen los Obispos con motivo de la Jornada Mundial del Enfermo.
Los prelados piden a la ciudadanía a reconocer y fortalecer el papel regulador de las autoridades civiles y militares. Reforma/Jesús Guerrero/Corresponsal