- Tulum se convertirá en el primer municipio de Quintana Roo en contar con un “Corredor Artesanal”, un espacio de comercialización turística que permitirá la oferta de artículos elaborados por manos mayas
El director general de Turismo y Economía, Jorge Mario Molina Pérez, en representación del presidente Diego Castañón Trejo, destacó el alto compromiso por el gobierno municipal para fortalecer la actividad artesanal ante los ojos del mundo, al realizar la entrega de apoyos para la creación del Corredor Artesanal en Tulum.
“Este un proyecto que lleva meses trabajándose y agradecemos ahora se concrete con la presencia de nuestros artesanos que son la cara de Tulum y Quintana Roo ante el mundo”, expresó.
Por su parte, Karla María Almanza López, secretaria de Desarrollo Económico del Estado, en representación de la gobernadora Mara Lezama, reconoció que Tulum es el rostro de los artesanos y con este proyecto se acortarán las brechas de desigualdad, impulsando y detonando la economía de mujeres y hombres propulsores de la actividad artesanal.
“Este es el primer corredor y vamos a seguir trabajando para que sean más. Como se mencionó, será esta vitrina de exhibición donde podremos comercializar todo esto, y sin duda miles de familias se van a ver beneficiadas”, dijo.
En representación de la FONART, Verónica Contreras dijo que la sinergia del tema turístico y artesanal, permitirán que a las familias de Tulum le vaya bien.
La artesana de Manuel Antonio Ay, Mirian Dzib Yam, agradeció a los tres niveles de Gobierno por impulsar estos espacios dignos para manos mayas.
El director de Economía en Tulum, Bady Gómez Soberano, apuntó que los corredores artesanales estarán distribuidos de la siguiente manera:
-2 en Manuel Antonio Ay
-1 en Francisco Uh May
-1 en Macario Gómez
El proyecto beneficiará a 24 personas, familias dedicadas exclusivamente a la elaboración de artículos artesanales, los cuales recibirán el subsidio para acondicionar un espacio, así como capacitación para cumplir el objetivo del corredor.
El proyecto fue aprobado por el Fondo Nacional para el Fomento de las Artesanías (FONART) del Gobierno de México, con apoyo del gobierno municipal y la Secretaría de Desarrollo Económico (SEDE).
