El texto final de la cumbre climática privilegia el verbo “abandonar” sobre “eliminar” gradualmente las energías contaminantes, y llama a las naciones a triplicar la capacidad de energía renovable en todo el mundo para el 2030.
A pesar de las diferencias y reñidos debates, la cumbre climática COP 28 concluyó este miércoles con un acuerdo calificado como “histórico” por el presidente de la Conferencia, Sultán Al-Jaber, luego de que por primera vez, se reconoce la necesidad de “abandonar” los combustibles fósiles para limitar el calentamiento global; sin embargo, también quedó claro que lo acordado no es suficiente para lograr la meta.
Al-Jaber, quien es además director ejecutivo de la Compañía Nacional de Petróleo de Abu Dabi (ADNOC, por su sigla en inglés) se congratuló por los esfuerzos realizados, pero añadió que su verdadero éxito residirá en su aplicación. “Somos lo que hacemos, no lo que decimos”, dijo en la sesión plenaria de la cumbre. “Debemos dar los pasos necesarios para convertir este acuerdo en acciones tangibles”, agregó, y resaltó la demostración de solidaridad mundial que significa el acuerdo alcanzado.
Sin embargo, en un discurso con mayor autocrítica, António Guterres, secretario general de las Naciones Unidas, aseguró que la COP 28 se produjo en un momento decisivo en la lucha contra la crisis climática, “un momento que exige la máxima ambición tanto en la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero como en la justicia climática.
Desde el comienzo de la Conferencia más de 100 países presionaron mucho para que el acuerdo de la COP 28 incluyera un lenguaje contundente sobre la “eliminación gradual” del uso del petróleo, el gas y el carbón, pero se encontraron con la poderosa oposición del grupo de productores de petróleo OPEP, liderado por Arabia Saudita.
Guterres fue crítico de esa postura, y señaló que pese haber omitido el término de “eliminación gradual” de los combustibles fósiles en el texto final de la COP 28, su destino histórico es “inevitable, les guste o no”. “La ciencia nos dice que limitar el calentamiento global a 1.5°C será imposible sin la eliminación gradual de todos los combustibles fósiles en un plazo coherente con este límite (…)
A aquellos que se opusieron a una referencia clara a una eliminación gradual de los combustibles fósiles en el texto de la COP 28, quiero decirles que la eliminación gradual de los combustibles fósiles es inevitable, les guste o no. Esperemos que no llegue demasiado tarde”, agregó el líder de la ONU.
Guterres añadió que en el balance mundial se reafirma el imperativo de limitar el aumento de la temperatura global a 1.5°C, lo que requiere reducciones drásticas en las emisiones globales de gases de efecto invernadero (GEI) en esta década. Para ello, por primera vez, el resultado reconoce la necesidad de abandonar los combustibles fósiles, después de muchos años en los que el debate sobre esta cuestión estuvo bloqueado.
Dijo que aunque los compromisos financieros son muy limitados, las promesas al Fondo Verde para el Clima ascienden ahora a una cifra récord de 12,800 millones de dólares para las comunidades más vulnerables al clima. Además, el nuevo marco sobre medidas de adaptación proporciona “un conjunto mensurable de nuevos objetivos para impulsar las medidas de adaptación y su implementación”.
Aún más crítico fue Simon Stiell, secretario ejecutivo de ONU Cambio Climático, quien aseguró que el texto deja mucho margen a la interpretación. “Este acuerdo es un suelo (de ambición), no un techo, por lo que los próximos años cruciales deben seguir aumentando la ambición y la acción climática”.
Primero dio una lista de progresos en la reunión, por ejemplo: triplicar las energías renovables y duplicar la eficiencia energética, poner en funcionamiento el fondo de pérdidas y daños, y hacer un primer pago inicial, además de un marco para el Objetivo Global de Adaptación.
Sin embargo, compartió que las numerosas iniciativas anunciadas aquí son sólo “salvavidas de la acción climática, no la línea de meta”. Dijo que lo importante es que estos compromisos se traduzcan en resultados en la economía real, que es donde realmente se pone en práctica la acción por el clima.
La COP 28 también tenía que poner freno al principal problema climático de la humanidad: los combustibles fósiles y su contaminación que quema al planeta. “Aunque en Dubái no hemos pasado totalmente la página de la era de los combustibles fósiles, es evidente que estamos ante el principio del fin”. El balance pide a las Partes que tomen medidas para lograr, a escala mundial, triplicar la capacidad de las energías renovables y duplicar las mejoras de la eficiencia energética para 2030.
La lista también incluye la aceleración de los esfuerzos hacia la eliminación progresiva de la energía del carbón sin disminuir, la eliminación progresiva de los subsidios ineficientes a los combustibles fósiles y otras medidas que impulsen la transición hacia la eliminación de los combustibles fósiles en los sistemas energéticos, de una manera justa, ordenada y equitativa, con los países desarrollados continuando a la cabeza.
¿Cuáles fueron los alcances?.
Al concluir la COP 28, el acuerdo final consensuado aboga por “abandonar los combustibles fósiles en los sistemas energéticos, de manera justa, ordenada y equitativa… con el fin de alcanzar el objetivo de cero emisiones netas en 2050, de acuerdo con los conocimientos científicos”.
También pide a las Partes que se triplique la capacidad de energía renovable en todo el mundo para 2030, que se aceleren los esfuerzos para reducir el carbón y que se tomen medidas para duplicar las mejoras de la eficiencia energética.
En total se alcanzaron 11 pactos y declaraciones, los trabajos que lograron consenso, son las primeras declaraciones de la historia sobre la transformación de los sistemas alimentarios y la salud, temas sobre las energías renovables, la eficiencia y la descarbonización.
Las cantidades comprometidas en los distintos acuerdos suman más de 83,000 millones de dólares en financiación lo que, según la organización de la cumbre del clima, supone marcar el ritmo de una nueva era en la acción climática.
Destacan también los 792 millones de dólares destinados al Fondo de Pérdidas y Daños, con objeto de apoyar a los países en primera línea de la crisis climática, los 3,500 millones para reponer el Fondo Verde para el Clima, así como el Fondo para los Países menos adelantados con 129.3 millones; el Fondo de Adaptación, con 123 millones y el Fondo especial para el Cambio Climático, con 31 millones.
Otros fondos vendrán del Banco Mundial, quien anunció un incremento de 9,000 millones anuales tanto en 2024 como en 2025 para financiar diversos proyectos relacionados con la acción climática, mientras que los bancos multilaterales de desarrollo se comprometieron a un aumento acumulado de más de 22,600 millones de dólares con el mismo fin.
Además, Emiratos Árabes Unidos (EAU) comprometió otros 200 millones para ayudar a los países vulnerables a través de los llamados Derechos Especiales de Giro y 150 millones más para financiar soluciones a la escasez de agua, un recurso cada vez más valioso.
En cuanto a compromisos y declaraciones incluye la Declaración sobre Agricultura, Alimentación y Clima (apoyada por 153 países), Declaración sobre Clima y Salud (por 141), el Compromiso Mundial por las Energías Renovables y la Eficiencia Energética (por 130) y la Declaración sobre Alivio Climático, Recuperación y Paz (con el respaldo de 78 países y 40 organizaciones).
Otros textos son la Declaración sobre Transiciones Justas con perspectiva de Género (apoyado por 78 países), el Compromiso de la Coalición para las Asociaciones Multinivel de Gran Ambición (por 67) el Compromiso de Enfriamiento Global (66), la Declaración sobre Hidrógeno y Derivados (37) y la Declaración sobre Financiación climática (13).
También, la Carta de Descarbonización del Petróleo y el Gas, firmada por 52 empresas que representan el 40% de la producción mundial del petróleo, y el Acelerador de la Transición Industrial, con el visto bueno de 35 empresas y media docena de asociaciones industriales, entre las que figuran la Asociación Mundial del Acero o la de Transporte Aéreo Internacional.
Los siguientes pasos.
ONU Cambio Climático está desarrollando las herramientas de notificación y revisión de la transparencia para su uso por las Partes, que se presentaron y aprobaron en la COP 28. Las versiones finales de las herramientas de presentación de informes deberán estar disponibles para las Partes en junio de 2024.
En la COP 28, las Partes también acordaron que Azerbaiyán acogerá la COP 29 del 11 al 22 de noviembre de 2024, y que Brasil hospedará la COP 30 del 10 al 21 de noviembre de 2025. Los próximos dos años serán cruciales. En la COP 29, los gobiernos deben establecer un nuevo objetivo de financiación para el clima que refleje la escala y la urgencia del desafío climático.
Y en la COP30, deben llegar preparados con nuevas contribuciones determinadas a nivel nacional que abarque toda la economía, cubran todos los gases de efecto invernadero y estén plenamente alineadas con el límite de 1.5 °C de temperatura.
La ciencia nos dice que limitar el calentamiento global a 1.5°C será imposible sin la eliminación gradual de todos los combustibles fósiles en un plazo coherente con este límite. Esto ha sido reconocido por una creciente y diversa coalición de países (…) A aquellos que se opusieron a una referencia clara a una eliminación gradual de los combustibles fósiles en el texto de la COP 28, quiero decirles que la eliminación gradual de los combustibles fósiles es inevitable, les guste o no. Esperemos que no llegue demasiado tarde”. El Economista/Nelly Toche