- El Congreso de México se convirtió en el escenario de un enigmático episodio que dejó a todos boquiabiertos. Sin embargo, no se trataba de naves espaciales con forma de platillo volador ni de criaturas verdes como las de las películas de Hollywood
La intrigante sesión parlamentaria abordó la posibilidad de la existencia de extraterrestres mientras legisladores escuchaban testimonios de investigadores de México, Estados Unidos, Japón y Brasil.
Este acontecimiento, sin precedentes en el Congreso mexicano, se desarrolló dos meses después de una audiencia similar en el Congreso de Estados Unidos. En esa ocasión, un ex oficial de inteligencia de la Fuerza Aérea estadounidense afirmó que su país tenía conocimiento de actividades “no humanas” desde la década de 1930.
José Jaime Maussan, un veterano periodista mexicano, presentó dos cajas que, según él y otros, contenían momias encontradas en Perú que podrían ser “seres no humanos no relacionados con nuestra evolución terrestre”. Estos cuerpos, con cabezas deformadas y arrugadas, causaron sorpresa y generaron un revuelo en las redes sociales.
Maussan declaró que si el análisis de ADN demostrara que estos seres son “no humanos y no tienen paralelo en el mundo, deberíamos tomarlo como tal“. Sin embargo, hasta el momento, se ha mostrado cauteloso en referirse a ellos como “extraterrestres”.
Estos cuerpos, aparentemente disecados, datan del año 2017 y fueron hallados en lo profundo del desierto costero peruano de Nazca, una zona conocida por sus enigmáticas figuras esculpidas en la tierra. Aunque la mayoría atribuye estas Líneas de Nazca a antiguas comunidades indígenas, su origen ha sido objeto de especulación.
Es importante mencionar que en 2017, Maussan hizo afirmaciones similares en Perú, pero un informe de la fiscalía concluyó que los cuerpos eran “muñecos recién fabricados, cubiertos con una mezcla de papel y pegamento sintético para simular la presencia de piel”. Este informe desestimó la teoría de que eran restos de antiguos extraterrestres.
La audiencia en el Congreso de México generó escepticismo entre algunos científicos. Julieta Fierro, investigadora del Instituto de Astronomía de la Universidad Nacional Autónoma de México, cuestionó muchos detalles de los hallazgos y señaló que se necesitaría una tecnología más avanzada que los rayos X para determinar si los cuerpos son “no humanos”.
SE DESLINDA EL LEMA
Mientras tanto el Laboratorio Nacional de Espectrometría de Masas con Aceleradores (LEMA), el Instituto de Física de la Universidad Nacional Autónoma de México informó a través de un comunicado en donde asegura que ellos no certificaron que sean seres no humanos.
“En mayo de 2017, el LEMA realizó un estudio de datación por Carbono14 a un conjunto de muestras que según la información proporcionada por el cliente eran de piel y de tejido cerebral de aproximadamente 0.5 gr, cuyos resultados fueron emitidos en junio del mismo año y entregados al usuario que lo solicitó.”
“Los trabajos de datación por carbono 14 que se llevan a cabo en el LEMA únicamente están destinados a determinar la antigüedad de la muestra que trae cada usuario y en ningún caso hacemos conclusiones sobre el origen de dichas muestras”
“El LEMA se deslinda de cualquier uso, interpretación o tergiversación posterior que se haga con los resultados que éste emite. En el caso del análisis de junio de 2017, cualquier información que implique la participación del LEMA en cualquier actividad distinta a la datación por Carbono 14, carece de total validez”.
En medio de estas afirmaciones intrigantes, cabe destacar que el Congreso no ha emitido una posición oficial sobre el tema. El congresista Sergio Gutiérrez Luna, del partido Morena, subrayó la importancia de escuchar todas las voces y opiniones sobre este enigma, destacando la necesidad de un diálogo transparente sobre la posibilidad de vida extraterrestre.
Esta misteriosa sesión en el Congreso mexicano se suma a una serie de eventos y testimonios sobre fenómenos aéreos no identificados (UAP, por sus siglas en inglés) que han capturado la atención de los legisladores y la comunidad científica en todo el mundo. Sin embargo, hasta ahora, las respuestas definitivas siguen siendo esquivas, dejando abiertas las puertas a la especulación y el misterio. El Independiente/Redacción Foto: Cortesía
