- Un militar de Estados Unidos se enroló con el crimen organizado, pero buscando convertirse en un ídolo y hasta con un corrido que exaltará sus hazañas
Infante de la Marina en Estados Unidos, Roberto Salazar II llevó una doble vida en el mundo del narcotráfico, al punto de solicitar a un cantautor mexicano que compusiera un corrido para exaltar sus hazañas criminales.
De la Marina al narco, en un solo paso
A sus 26 años, Salazar fue condenado a 122 meses de prisión por importar drogas desde México que eran distribuidas en territorio estadounidense. Sus actividades delictivas las realizaba mientras estaba en servicio activo en la Base Aérea de Miramar del Cuerpo de Infantería de la Marina en San Diego.
Pese a su corta edad, el ex infante logró traficar droga a través de vehículos especiales. Entre las sustancias ilícitas que traficaba y luego eran distribuidas en Estados Unidos se encontraba heroína, metanfetamina, cocaína y fentanilo (el mortal opioide sintético que ha generado una crisis de salud pública en el país vecino).
Pero las acciones de Roberto Salazar II no siempre se cumplieron con éxito, pues pese a que reclutó a otros infantes de la Marina para que se sumaran a sus maniobras delictivas, cometió un par de errores que finalmente lo llevaron a su detención.
El modus operandi de Salazar consistía en reclutar a personas que transportaran la droga desde México a Estados Unidos, por medio de vehículos que contaban con un compartimento secreto en el motor, el cual era usado para ocultar los enervantes a las autoridades.
“Salazar ayudaba a obtener estos coches específicos y a entregarlos a una empresa en México, donde se indicaba a los mensajeros que recogieran las unidades con la droga cargada en su interior y los condujeran a través de la frontera”, dio a conocer el Departamento de Justicia.
Entre los individuos reclutados, según documentos judiciales, se encontraban dos antiguos miembros del Cuerpo de Marines que habían sido dados de baja del servicio anteriormente. Por cada cargamento de droga que lograban importar con éxito, Salazar les pagaba cerca de 2 mil dólares. Desde 2013 se mantuvo en la actividad.
Sin embargo, varios de sus mensajeros y cómplices -incluyendo un ex infante de la Marina- fueron capturados en la frontera por agentes de Aduanas. Esto se sumó a que uno de los conspiradores de Salazar falló al entregar un kilo de heroína en Las Vegas, por lo que tuvo que abandonar dicha sustancia en la estantería de un supermercado.
“Quise estudiar y me hice soldado, pero me gustaba más la vida rápida”, fue una de las líneas que Salazar sugirió a un cantante mexicano para que le compusiera un narcocorrido, para que fuera recordado en un tema musical, igual que los grandes capos de México. No se reveló su identidad.
Salazar fue detenido y se declaró culpable en octubre del año pasado. Seis meses después, en abril de este 2023, fue sentenciado a 12 años de prisión por la juez de distrito Janis Sanmartino. El Independiente/Redacción