Rafael Pascual
Miembros de la Central Mexicana de Alcohólicos Anónimos (AA), advirtieron que la ingesta cerveza sin alcohol, representa un alto riesgo para las personas en proceso de recuperación y desintoxicación del alcoholismo.
En una reunión que sostuvieron en una cafetería de Cancún y en donde dialogaron con los medios de comunicación sobre una serie de actividades que están desarrollando, dijeron el tema del consumo de cervezas sin alcohol, podría incluso a ser peor que la otra.
Indicaron que a pesar de que estas cervezas contienen un bajo o nulo contenido de alcohol, su consumo puede desencadenar un efecto psicológico negativo para la persona.
“Al estar asociada con el sabor, olor y ritual del consumo de alcohol, podría generar en las personas en recuperación un aumento en el deseo de beber, afectando el control que intentan mantener sobre su adicción”, afirmó Leonides N.
Por ello, la organización señaló que es fundamental evitar cualquier producto que rememore o imite la experiencia de consumo, ya que esto podría interferir con el progreso alcanzado durante la rehabilitación.
Ante ello, sostienen que aunque las etiquetas puedan indicar la ausencia de alcohol, es común que algunas marcas incluyan una mínima cantidad de este, lo que podría ser perjudicial para alguien que lucha contra la adicción.
Finalmente, dijeron: “como Alcohólicos Anónimos, instamos a quienes están en tratamiento, así como a sus familiares y amigos, a mantenerse informados y evitar cualquier sustancia que pueda poner en peligro su recuperación”.
Cabe destacar que recientemente la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) especificó que ninguna cerveza que se comercializa como sin alcohol se le puede definir como cerveza.
Se indicó que en los últimos años se han difundido una gran variedad de cervezas, entre las que se encuentran aquellas con bajo contenido alcohólico, además de nuevas variantes llamadas Cero o Sin alcohol, por ello, el Laboratorio Nacional de Protección al Consumidor analizó estas bebidas.
“El contenido alcohólico de una cerveza va de 2% a 20% Alc. Vol., por lo que los productos con menos de 2% no pueden utilizar la denominación “cerveza”, ya que no son cervezas, son bebidas no alcohólicas”, dio a conocer la Profeco.
Además, la cerveza baja en alcohol también puede considerarse de “bajo contenido energético”, siempre y cuando se le reduzca al menos un 24% el contenido energético de su original.
Sin embargo, muchas de ellas tienen el olor a una cerveza normal y eso lo que advierten los integrantes de la Central Mexicana de Alcohólicos Anónimos (AA), pues en lugar de que una persona que está en rehabilitación se ayude, el consumir una de éstas, podría ser contraproducente.