Rafael Pascual
En pleno operativo de seguridad y la puesta en marcha del plan “Fuerza de Tarea Interinstitucional de 100 Días”, integrada por la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, Secretaría de la Defensa Nacional, Marina, Guardia Nacional, Fiscalía General del Estado y Secretaría de Seguridad Ciudadana de Quintana Roo, tres millonarios robos registrados en Cancún, han evidenciado la poca efectividad de las corporaciones.
La tarde-noche del pasado jueves, se activó el Código -Rojo tras el robo con violencia de 10 millones de pesos en un domicilio de la zona residencial Jardines del Sur 1, hasta donde ingresaron dos sujetos armados para sustraer el efectivo que presuntamente estaba destinado al pago de nómina de una obra en construcción.
Llama la atención cómo pudieron ingresar los sujetos a dicha zona residencial, pues en todas existen casetas de seguridad en donde solo se permite entrar a los residentes o personas que ellos autoricen y para eso tienen que dejar una identificación, por lo que en este caso podría haber complicidad, pues los presuntos escaparon con total impunidad con el dinero y dejaron abandonada una camioneta Peugeot blanca en el mismo Polígono Sur, que es considerada la de mayor plusvalía de Cancún.
El martes pasado, también sujetos armados robaron con violencia la residencia de la ex diputada local, Elda Candelaria Ayuso Achach, ubicada en la región 313, en la delegación Alfredo V. Bonfil. El incidente ocurrió en las calles Alcanfores, cuando ladrones irrumpieron en el hogar mientras la familia se encontraba dentro.
Los delincuentes, que portaban armas de fuego, amedrentaron a los ocupantes de la casa y lograron apoderarse de dinero en efectivo, joyas y otros objetos de valor antes de darse a la fuga. Afortunadamente no se reportaron lesionados durante el incidente.
El 16 de octubre se registró un asalto a mano armada en hotel de la zona de playas de Cancún, en donde unas personas entraron al Hotel Royal Park, ubicado en el kilómetro 12.5 y sustrajeron más de 800 mil pesos que transportaba un diligenciero de la CTM y que estaba destinado al pago de propinas de trabajadores sindicalizados de dicho centro de hospedaje.
Tras el hecho, se emprendió un operativo que incluyó el cierre parcial del bulevar Kukulcán, pero como siempre, no hubo detenidos.
Desde estas fechas, muchas empresas e incluso personas que tienen algún negocio formal, comienzan a tener recursos para afrontar pagos de nóminas, prestaciones e incluso los aguinaldos que se avecinan, lo que enciende las alarmas por los robos que se están registrando.