Luego de trascender mediáticamente una denuncia por allanamiento de morada y amenazas, Roberto Palazuelos aseguró que la Fiscalía General de Quintana Roo estaba tramando implementar una orden de aprehensión para poder meterlo a la cárcel, así como privarlo de sus derechos político-electorales; situación que fue desechada por un Juez de Control, quien desestimó los argumentos.
El abanderado de Movimiento Ciudadano al senado de la República, dijo que lo anterior, sumado a la persecución política en su contra, tiene como objeto vulnerar la alta aceptación de su candidatura.
Precisó que este martes comenzó a circular una noticia calumniosa, falsa y tendenciosa, en la que supuestamente se le imputa un delito del que ni siquiera tenía conocimiento
Indicó que el 26 de enero del presente año, una persona abrió una carpeta de investigación en su contra, por un supuesto allanamiento de morada y amenazas, donde el denunciante “admite, ni encontrarse en el lugar de los hechos, ni que estos le consten”, sino que presenta a dos de sus trabajadores a declarar.
Con base en esto se intentó fabricar un delito que no cometió, dijo Palazuelos, quien agregó que en su calidad de Presidente de Colonos de “su Isla”, tuvo conocimiento por parte de sus vecinos, que la noche anterior personas ajenas al condominio se introdujeron ilegalmente, en una lancha cargada de materiales, para ejecutar una obra clandestina, burlando los sistemas de control y seguridad del fraccionamiento, ya que no tenían un permiso de construcción del Comité de Vigilancia, y por ende, no podían introducir el material por la puerta principal.
Apuntó que estas personas construían un muelle que bloqueaba el libre tránsito del canal y del cual aseguraban tener permiso, lo anterior resultó ser completamente falso y ser violatorio de la normatividad del fraccionamiento, ya que al consultar con el Comité de Construcción y el Comité de Vigilancia, no se contaba con ningún permiso.
Ante tal situación y a petición de mis vecinos, me presenté como presidente de colonos en las afueras de la residencia donde se llevaba a cabo la construcción ilegal, y pregunté a las personas ahí presentes si tenían los permisos para edificar el muelle, quienes me cuestionaron que quién era yo, y con insultos se negaron a proporcionarme la información; el mismo trato recibí por parte del dueño de la casa
Acto seguido, uno de ellos me acercó su teléfono celular y me comunicó con el dueño de la casa; situación que reportó a la administración del lugar estos hechos, donde me indicaron que no había ningún permiso del comité para dicha obra.