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viernes 13 septiembre 2024

Tamaulipas y Michoacán, los más mortales para los militares: EmeEquis

  • Los estados donde más ataques han recibido los militares mexicanos son Tamaulipas y Michoacán, en el primer caso, con 551 agresiones en los últimos seis años, mientras que en Michoacán se han reportado 219

Sandra Romandía (@Sandra_Romandia), en su investigación para EmeEquis, reporta que, del año 2019 al mes de mayo del año 2024, las fuerzas armadas de México han sufrido mil 466 ataques directos por civiles armados en 28 entidades federativas, en las que han muerto mil 184 personas, entre ellos mil 104 civiles y 80 militares.

Los estados donde más ataques han recibido los militares mexicanos son Tamaulipas y Michoacán. En el primero se han reportado 551 ataques a elementos de la Sedena y de la Marina en los últimos seis años, donde han muerto 582 civiles armados y 21 elementos de la Sedena.

Mientras que en Michoacán se han reportado 219 ataques, en los que han muerto 173 civiles muertos y 12 elementos de la Sedena.

TAMAULIPAS, VIOLENCIA NORMALIZADA

La violencia de los cárteles en la frontera de Tamaulipas es algo común. El estado vive constantemente entre el miedo y el horror por las batallas entre grupos del crimen organizado y de los mismos criminales con las diferentes autoridades, entre ellas el Ejército mexicano.

Las facciones de Los Zetas que continúan activas en Tamaulipas se disputan el dominio del territorio entre ellas, pero también con las otras células del Cártel del Golfo que dominan las principales ciudades fronterizas y Tampico, puerto marítimo prioritario en el estado.

La disputa por el poder que las células delictivas perpetran a lo largo y ancho de Tamaulipas mantiene al estado sumergido en una ola de violencia que, con la reconfiguración del hampa en el país, ahora también se enfrenta a la intrusión de un nuevo y peligroso actor: el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).

El 5 de febrero, Reynosa vivió cinco días seguidos de balaceras por enfrentamientos entre criminales y fuerzas federales, además del derribo de cámaras de videovigilancia del Centro de Comando, Control, Cómputo, Comunicaciones y Contacto (C5) de Tamaulipas.

Para tumbar los postes con cámaras del C5, los integrantes de grupos delictivos recurrieron a camiones de pasajeros y transportes de carga con los que embistieron los postes del C5.

El 19 de febrero un enfrentamiento entre civiles y miembros del Ejército en Miguel Alemán, Tamaulipas, dejó un saldo de 12 muertos. La Vocería de Seguridad del Estado apuntó que todos los fallecidos eran supuestamente agresores.

La violenta balacera se dio después de que un grupo de personas agrediera a miembros de la Secretaría de la Defensa (Sedena) en la colonia Loma Linda del municipio fronterizo, de acuerdo al comunicado. Las autoridades estatales han reportado además el aseguramiento de “12 armas largas, cartuchos y cargadores de diversos calibres”.

Jorge Cuéllar, el vocero de Seguridad de Tamaulipas, estado que gobierna Américo Villarreal, aseguró en ese entonces que había muchas noticias falsas sobre la inseguridad en la entidad y lo vinculó con el proceso electoral del pasado 2 de junio.

Sin embargo, son constantes los enfrentamientos por el tráfico de diferentes sustancias, que van del combustible a las drogas. Incluso de personas. Las mafias controlan el tránsito de miles de migrantes cada año, desde el sur al centro de México, cobrándoles extorsiones en forma de permisos de tránsito.

MICHOACÁN, TAMBIÉN BAJO FUEGO

En Michoacán, aunque cambian los actores, la situación no es muy diferente a la de Tamaulipas. El Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), Los Caballeros Templarios, Los Viagras y Cártel de Los Reyes, éstos dos últimos que forman parte del conglomerado criminal autodenominado como Cárteles Unidos, son los protagonistas de una encarnizada guerra.

Los grupos de sicarios de estas organizaciones criminales se disputan el control de actividades como la producción y tráfico de drogas como la marihuana y el cristal (metanfetaminas), así como secuestros y la extorsión a comerciantes, transportistas y agricultores.

Apenas el 9 de mayo pasado, elementos de la Sedena se enfrentaron con sicarios del CJNG en la localidad de Ayumba perteneciente al municipio de Cotija, Michoacán, acción que dejó a diez personas muertas y a un militar herido.

Cotija es el municipio donde Yolanda Sánchez Figueroa, presidenta municipal con licencia, fue asesinada la noche del lunes 3 de junio.

De acuerdo con la información, el CJNG busca hacerse del territorio de Cotija a través de su Grupo Delta, pero también tiene presencia Cárteles Unidos o La Resistencia y Los Pájaros de la Sierra, célula que nació luego de traicionar al CJNG.

Ese día, la Secretaría de Seguridad Pública de Michoacán reportó que la Guardia Civil en coordinación con el Ejército Mexicano, la Guardia Nacional y policías municipales habían desplegado un operativo en los municipios de Tocumbo y Cotija, luego recibir reportes de detonaciones de arma de fuego en distintos puntos de la zona.

Precisó que personal militar fue atacado por sicarios del Grupo Delta, brazo armado del CJNG, en la localidad de Ayumba.

Sin dar detalles de los hechos, la SSP refirió que en el lugar se decomisaron 10 armas de fuego, una corta y nueve fusiles, chalecos balísticos con insignias de la estructura de Nemesio Oseguera Cervantes, alias “El Mencho”, líder del CJNG, así como una camioneta con impactos de arma de fuego.

Más de 50 individuos armados y vestidos con equipo táctico, presumiblemente miembros del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), se presentaron en Los Reyes. Este grupo, autodenominado Grupo Delta, ha declarado públicamente su presencia en la región, un dato que fue revelado a través de un video difundido el martes 16 de abril.

Esta información sugiere una posible disputa o una operación de limpieza interna, dado que el portavoz asegura que el Grupo Delta no participa en prácticas como el cobro de piso, un método de extorsión comúnmente asociado con la delincuencia organizada.

Por otra parte, en Playitas, municipio de Tumbiscatío, grupos criminales llevan meses quemando viviendas y aserraderos, ante la falta de recursos de la autoridad local que solo tiene siete policías a su disposición.

Playitas quedó parcialmente quemada. Los cárteles que se disputan esa parte de la sierra utilizan drones con bombas y minas explosivas, las cuales han causado el incendio de hogares y automóviles de docenas de habitantes.

Apolonio Ureña, presidente municipal de Tumbiscatío, Michoacán refiere que del total de la familias que habitaban Playitas solo quedan entre ocho o nueve familias.

De 100 familias que eran las que estaban en esa localidad, ahora habrá unas ocho, nueve familias. Es el bastión de Los Caballeros Templarios asediados por el CJNG.

El Independiente/ Redacción        Fotos: cuartoscuro y Sedena/cuartoscuro

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