Rafael Pascual
El apagón masivo ocurrido la tarde del lunes afectó a siete municipios del estado, impactando significativamente al sector restaurantero. José Julio Villareal Zapata, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac) en Cancún y Quintana Roo, informó que el 25% del mercado de restaurantes se vio afectado en sus operaciones.
Explicó que debido a los cortes intempestivos y las sobrecargas eléctricas, varios establecimientos sufrieron pérdidas económicas, así como daños parciales o totales en electrodomésticos y equipos esenciales para su funcionamiento.
Además, advirtió que estos apagones generan incertidumbre en los inversionistas, ya que evidencian una infraestructura insuficiente para soportar grandes proyectos en la región.
Ante esta situación, el líder de la Canirac hizo un llamado a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) para que tome medidas urgentes y garantice la estabilidad del suministro eléctrico.
“Solicitamos encarecidamente a la CFE, como lo hemos hecho en reiteradas ocasiones a nivel federal, que voltee a ver al sureste, donde es imprescindible la construcción de nuevas plantas generadoras de energía”, declaró.
Villareal Zapata también enfatizó la necesidad de prevenir futuros apagones, especialmente con la llegada de la temporada alta, en que una interrupción del servicio eléctrico podría causar severos daños a la economía de los negocios locales.
El representante de la Canirac advirtió que, con la próxima llegada de la temporada alta, es fundamental evitar apagones que puedan afectar gravemente a los negocios y la economía local.
Según un comunicado oficial de la CFE, la interrupción del servicio fue provocada por un alto índice de humedad en el gasoducto Mayakán, lo que alteró la calidad del gas proveniente de la central de cogeneración Nuevo Pemex.
Esto impidió el funcionamiento normal de varias plantas generadoras, obligándolas a usar combustibles alternos y agravando la situación.
El apagón dejó sin energía eléctrica a miles de hogares y comercios en Campeche, Quintana Roo, Tabasco y Yucatán, evidenciando la urgente necesidad de fortalecer la infraestructura eléctrica en la región para evitar futuras crisis.