- Hasta ahora no se ha informado sobre un distribuidor vial que se requiere en el Bulevar Kukulcán para manejar el ingreso y salida de vehículos del puente
Rafael Pascual
La construcción del Puente Vehicular Nichupté, una de las obras emblemáticas de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), registra un avance del 77.8%, informó la dependencia en un comunicado.
Con una longitud total de 11.2 kilómetros, el puente conectará la zona hotelera de Cancún con el Bulevar Colosio y las avenidas Tulum, Kabah y Bonampak. La obra incluye un puente principal de 8.8 km, un arco metálico de 103 metros, dos entronques de acceso (2.4 km en total), ciclovía, andadores peatonales, paraderos y sistema de iluminación.
Este proyecto, que será uno de los más largos sobre una laguna en América Latina, incorpora un diseño sustentable. Se desarrolla en la zona de manglares y la Laguna Nichupté con un proceso tecnológico que protege el ecosistema, e incluye un programa de restauración ambiental con la reforestación de 306 hectáreas de mangle.
La estructura contará con una sección de 14.9 metros de ancho para tres carriles: uno para cada sentido y uno reversible, adaptado a la demanda vehicular. También funcionará como vía alterna de evacuación ante desastres naturales o emergencias.
El puente beneficiará a más de 1.3 millones de habitantes y facilitará el acceso a la zona hotelera, reduciendo hasta 45 minutos los tiempos de traslado. Se espera que la obra finalice en el segundo semestre de 2025.
Además, estará equipado con un Sistema Inteligente de Transporte (ITS) conectado al C4 para brindar mayor seguridad a residentes y turistas, especialmente ante fenómenos climáticos extremos. Cada año, Cancún recibe alrededor de 20 millones de visitantes.
No obstante, hasta el momento no se ha informado sobre la infraestructura complementaria que se requiere en el Bulevar Kukulcán para distribuir el ingreso y salida de vehículos desde el puente. La ausencia de un distribuidor vial podría generar cuellos de botella y congestionamiento en la zona hotelera, contradiciendo los objetivos de movilidad fluida y reducción de tiempos de traslado que busca el proyecto.