- México pierde competitividad ante los destinos que no solicitan dicho pago, dijo Michele Paige, directora general de la Asociación de Cruceros de Florida y el Caribe.
Michele Paige, directora general de la Asociación de Cruceros de Florida y el Caribe (FCCA, por sus siglas en inglés), señaló que los cruceristas internacionales que arriban a nuestro país tienen la capacidad de gastar hasta 200 dólares (unos 4 mil pesos) durante su estancia en los puertos mexicanos, siempre y cuando en los próximos meses el gobierno no tome la decisión de aplicar el cobro de derecho de no residentes (DNR) a esta industria.
Entrevistada al final de una conferencia de prensa, indicó que la industria de los cruceros “ama a México, al producto mexicano”, pero un cobro adicional de 40 dólares a los cruceristas provocará que nuestro país no sea competitivo ante los nuevos destinos, donde dicho pago no se realiza, las grandes empresas borren nuestros puertos de sus itinerarios.
En diciembre se dio a conocer que el gobierno mexicano tenía la intención de cobrar el DNR a los cruceristas que ingresan a los puertos mexicanos desde el primer día de este año.
Se trata de un impuesto de 42 dólares (860 pesos) a quienes llegan a nuestro territorio por esa vía. Por décadas estuvieron exentos del pago con la justificación de que no pasaban la noche. La FCCA, que reúne a las principales firmas del sector, como Royal Caribbean o la división de cruceros de Disney, sostuvo reuniones con el gobierno mexicano y se acordó posponer la entrada en vigor del cobro hasta el 1º de julio. “Nos han dado una prórroga de seis meses y nos han dicho que nos preparemos para que esto entre en vigor en julio.
Esto no es un cargo a la industria de cruceros, sino contra los cruceristas, pero nuestros cruceros ya han sido vendidos entre 18 y 24 meses antes”, explicó Paige. Con esto, destinos de suma importancia, como Cozumel, Quintana Roo, “se hacen más caros, y tiene grandes repercusiones: por ejemplo, 40 por ciento del PIB de esa entidad depende de esta industria.
Esto provocará que México no sea competitivo, pues cuando una familia elige adónde ir de vacaciones y puede visitar el Caribe o un itinerario que incluya México, pues va a ir adonde pueda ahorrar recursos, y nosotros adonde podamos ganar más dinero.
“Los cruceristas están de seis a siete horas en México, mientras un turista se queda entre cinco o seis días; estamos una décima parte de lo que ellos están. Estamos siendo castigados o penalizados por venir y eso no tiene sentido”, acotó.
Y abundó que “el pasajero promedio gasta 100 dólares en México, y la tripulación, 60; podemos duplicar eso con trabajo conjunto. Si vemos destinos en el Caribe, el desembolso es de 200 dólares, eso se puede gastar aquí… Debemos trabajar juntos para mostrar todos los maravillosos bienes que produce México… Creemos en ustedes”, concluyó.