- Estos hechos se han vuelto el pan de cada día para los cancunenses. El cobro de extorsiones y la impunidad con la que se cometen estos actos violentos, han convertido a la ciudad en un lugar cada vez más inseguro
Rafael Pascual
La tarde de este lunes se vivieron momentos de tensión en el estacionamiento de la tienda Chedraui ubicada sobre la avenida Chacmool, en el fraccionamiento Gran Santa Fe, luego de que se registraran varios disparos de arma de fuego a plena luz del día.
De acuerdo con los primeros reportes, al menos cinco casquillos percutidos fueron localizados en el sitio. Testigos señalaron que los presuntos responsables huyeron rápidamente a bordo de una motocicleta tras disparar contra una barbería situada justo afuera del centro comercial.
Aunque no se reportaron personas lesionadas, el hecho provocó pánico entre clientes y trabajadores que se encontraban en el lugar.
Hasta el momento, las autoridades no han confirmado si se trató de un intento de robo o de un ataque directo vinculado al cobro de derecho de piso, una práctica delictiva que se ha incrementado alarmantemente en Cancún en los últimos años y que mantiene en jaque a pequeños y medianos comerciantes.
Elementos de la policía municipal acudieron al lugar para acordonar el área, realizar el levantamiento de indicios y reforzar la vigilancia. La Fiscalía General del Estado ya abrió una carpeta de investigación, aunque como en muchos casos similares no se ha informado sobre personas detenidas.
Este tipo de hechos, lejos de ser aislados, se han vuelto el pan de cada día para los cancunenses. La presencia de grupos criminales, el cobro de extorsiones y la impunidad con la que se cometen estos actos violentos, han convertido a la ciudad en un lugar cada vez más inseguro, incluso en espacios públicos y a plena luz del día.
Mientras las autoridades insisten en que se trata de hechos “focalizados”, la realidad cotidiana para miles de ciudadanos es la incertidumbre, el miedo y la normalización de la violencia.
