dw.com Foto: Alkis Konstantinidis/Reuters
El papa Francisco advirtió este lunes (06.12.2021) que muchos jóvenes “son de redes sociales pero poco sociales” y viven “prisioneros de sus teléfonos móviles”, y se dirigió a ellos para animarles a salir a buscar a los demás y no encerrarse, en un encuentro en la escuela internacional de San Dionisio de las monjas Ursulinas en Atenas, en el último acto de su visita a Grecia.
“Corremos el peligro de olvidarnos de lo que somos, obsesionados por miles de apariencias, por mensajes machacones que hacen depender la vida de la ropa que usamos, del automóvil que conducimos, del modo en que nos miran los demás”, advirtió Francisco en el gimnasio del centro educativo, ante jóvenes, profesores y religiosas sentados a distancia por las medidas anticovid.
A ellos les aconsejó reconocer su valor “por lo que eres y no por lo que tienes”, pues “no vales por la marca de la ropa o por el calzado que llevas, sino porque eres único, eres única”, les dijo. Y puso el ejemplo del mito de las sirenas que aparecen en la Odisea, que Ulises encuentra en su viaje y que atraen a los navegantes con su canto para hacerlos estrellarse contra los arrecifes.
Las sirenas de hoy en día “quieren hipnotizarlos con mensajes seductores e insistentes” y “apuntan a beneficios fáciles, a las falsas necesidades del consumismo, al culto del bienestar físico, a la diversión a toda costa”.
“¿Quieres hacer algo nuevo en la vida? ¿Quieres rejuvenecer?”, preguntó Francisco y él mismo respondió: “No te contentes con publicar algún post o algún tuit. No te contentes con encuentros virtuales, busca los reales, sobre todo con quien te necesita; no busques la visibilidad, sino a los invisibles. Esto es original, esto es revolucionario”.
Francisco pidió a los jóvenes “salir de las propias zonas de confort” porque, aunque “es más fácil estar sentados en el sofá frente a la televisión”, eso es “algo de viejos” porque “de jóvenes es reaccionar, abrirse cuando uno se siente solo, buscar a los demás cuando viene la tentación de cerrarse”.
Con este acto, el papa se despidió de Grecia, donde llegó el pasado sábado procedente de Chipre, en el que ha sido su viaje número 35 y que ha estado marcado principalmente por la denuncia de la indiferencia de los países europeos para afrontar el problema de la migración. (EFE)