Agencia EFE
El pueblo indígena seri, en Sonora, no está de acuerdo con la suspensión de la lucrativa cacería del borrego cimarrón, que cada año significa ingresos millonarios, y cambiarla por safaris turísticos a la Isla del Tiburón, la más grande del país, como lo ha propuesto el presidente Andrés Manuel López Obrador.
El consejo de ancianos y el gobernador de la comunidad indígena comca’ac (seri) se han negado a aceptar esta condición que forma parte de las negociaciones del Plan de Justicia para los Pueblos Indígenas, con el que se busca resolver los rezagos históricos de Punta Chueca (Hermosillo) y El Desemboque (Pitiquito), comunidades ubicadas en la costa del Mar de Cortés.
Cada año, decenas de cazadores extranjeros pagan entre 50 mil a 60 mil dólares (entre un millón y 1.2 millones de pesos) para entrar al territorio, que protege la guardia tradicional seri, y dispararle a un borrego cimarrón (Ovis Canadensis).
Esa actividad representa ganancias millonarias que supuestamente deberían beneficiar a estos pueblos indígenas, sin embargo, el destino de estos recursos es un misterio.
El miércoles, en su conferencia de todos los días, López Obrador reconoció que no había recibido una respuesta de las autoridades tradicionales de la comunidad comca’ac (seri) a su propuesta de suspender la cacería del borrego cimarrón para cambiarla por safaris fotográficos a la Isla del Tiburón.
«Los seris obtienen ingresos por la caza del borrego cimarrón, en la Isla del Tiburón; por necesidad, tienen ellos que obtener estos recursos. Hay cazadores que pagan para cazar a borregos en la isla. La propuesta que les estamos haciendo es que se cambie esa actividad por la observación, que puedan ir a observar el borrego cimarrón sin cazarlo», expuso el mandatario.
López Obrador aceptó que no será lo mismo en términos económicos, pero apuntó que su Gobierno les ofrece ayudarlos para que tengan ingresos y que ayuden como guías de turistas de personas que quieran «conocer esas bellezas naturales, esa costa de Sonora, y la importancia de esa cultura».
RESPUESTA NEGATIVA
En el programa 60 segundos, transmitido en Facebook, el gobernador de la nación comca’ac, Joel Barnett Morales, afirmó que el tema se ha discutido con autoridades federales y estatales a quienes les informó que las autoridades tradicionales indígenas rechazaron la propuesta presidencial sobre el borrego cimarrón.
«Hablé con (Alfonso) Durazo (gobernador de Sonora) sobre el tema de la cacería, y me agarré (discutí) con él, no me importaba si es gobernador o no, le dije que yo no esperaba esto, porque de todo lo que estábamos haciendo al final yo no pensaba que iba a hacer a cambio de esto (suspender la cacería)», explicó en el programa.
Señaló que, aunque no se lo dijeron directamente, él cree que todos los proyectos están aprobados.
«Ahora quieren que se cancele la cacería del borrego cimarrón y yo le dije que no, tanto el Gobierno estatal como el federal tienen la obligación de apoyar a las comunidades indígenas del país, por lo tanto, no veo la necesidad de cerrar o cancelar la cacería, aquí no se va cancelar nada», remarcó el gobernador indígena.
Actualmente, la comunidad comca’ac está integrada por unos 1 mil habitantes, distribuidos en dos poblaciones, Punta Chueca en la costa de Hermosillo, capital de Sonora, y El Desemboque, en el municipio de Pitiquito.
El Plan de Justicia contempla resolver la principal problemática de esta etnia que es el acceso al agua potable, pero también acciones de salud, educación, desarrollo social y económico y hasta ahora ningún presidente de México los había visitado.
Cada año, la venta de permisos para cazar borregos cimarrones en la Isla del Tiburón deja ganancias que superan los 700 mil dólares, sin embargo, estos recursos nunca se han visto reflejados en estas comunidades indígenas.
Según el último censo, las autoridades establecían una población del borrego cimarrón para Sonora de 7,591 ejemplares, 3,829 en vida libre y 3,762 en confinamiento, muy superior al que se calculaba en 1976 con apenas 1 mil ejemplares.
Mientras en 2019 se estimaba que en Isla del Tiburón existía una población de 800 borregos cimarrón. Según autoridades, los seris tienen permiso para el aprovechamiento, de manera sustentable, de al menos 12 ejemplares al año.
El próximo sábado, en la segunda visita del presidente López Obrador a la comunidad comca’ac, se formalizará el Plan de Justicia para el Pueblo Seri y se conocerá el futuro de la cacería del borrego cimarrón en la Isla del Tiburón.