- El mariscal estrella de los Jefes de Kansas City se recuperó de un esguince en el tobillo derecho, que sufrió durante la victoria frente a los Jaguares de Jacksonville
Kansas City
Patrick Mahomes terminó una semana de práctica con su lesionado tobillo y el entrenador de los Jefes, Andy Reid, aseguró que su mariscal está listo para el duelo de campeonato ante los Bengalíes, un partido de revancha con el actual monarca de la Americana y subcampeón de la NFL.
Se ve bien. Va a salir y jugar, aseguró Reid. Sin embargo, Kansas City puso en duda para el encuentro de mañana a Travis Kelce, el ala cerrada con el que Mahomes se ha combinado a la perfección y es su principal arma letal.
Y la línea ofensiva sigue a la baja, pues además de Kelce, la franquicia reportó ayer en su cuenta de Twitter a los receptores Mecole Hardman y Justin Watson.
Cincinnati, a su vez, descartó a los linieros ofensivos Jonah Williams y Alex Cappa para el encuentro en el Arrowhead Stadium en la disputa por la final de conferencia.
Mahomes ha disputado la que posiblemente es su mejor campaña, lanzando para un máximo de carrera de 5 mil 250 yardas y 41 touchdowns por aire, para liderar la liga. Recibió 49 de 50 votos de primer lugar como All-Pro y está entre los cinco finalistas a MVP.
Siento que aún puedo hacer muchas cosas, dijo el mariscal. Veremos mientras nos acercamos más y durante el partido
El pasador, de 27 años, y con un anillo de campeón, sufrió un esguince en el tobillo en el primer periodo de la victoria en la ronda divisional contra Jacksonville y regresó al medio tiempo para terminar y asegurar por quinta vez la final por el campeonato.
El otro boleto al Supertazón del 12 de febrero en Glendale (Arizona) estará en juego en la cancha de Filadelfia, el mejor equipo de la fase regular, frente a San Francisco, la defensa número uno de la liga.
Los 49ers, ansiosos por acabar con una sequía de títulos de más de un cuarto de siglo, competirán en su tercera final de la Conferencia Nacional de los últimos cuatro años, esta vez bajo la dirección de un mariscal novato, Brock Purdy.
La enorme inversión de San Francisco pasará su prueba de fuego ante las Águilas de Jalen Hurts, consagrado esta campaña como un quarterback de élite y capaz de causar daño tanto en pase como corriendo. La Jornada/Ap y Afp