- Los jueces de inmigración están abrumados. Los jueces de inmigración ahora tienen un promedio de 4,500 casos pendientes cada uno. Si se reuniera a cada persona con un caso de inmigración pendiente, sería mayor que la población de Chicago
El atasco de casos que esperan decisión en cortes de inmigración de EE.UU. sobrepasó los tres millones en noviembre de 2023, lo que mantiene “abrumados” a jueces, según análisis revelado por la Universidad de Syracuse.
Los jueces de inmigración están abrumados. Los jueces de inmigración ahora tienen un promedio de 4,500 casos pendientes cada uno. Si se reuniera a cada persona con un caso de inmigración pendiente, sería mayor que la población de Chicago, la tercera ciudad más grande de Estados Unidos.
Las administraciones anteriores –al menos desde la administración de George W. Bush– han fracasado cuando intentaron abordar el problema aparentemente intratable del “atraso” en la Corte de Inmigración.
Sin embargo, recientemente, el crecimiento acelerado del trabajo atrasado de la Corte ha transformado el problema en un desafío aún más desalentador.
MÁS JUECES Y FINALIZACIONES ACELERADAS NO SON SUFICIENTES
Un análisis detallado de los registros judiciales caso por caso obtenidos y analizados por Transactional Records Access Clearinghouse (TRAC) de la Universidad de Syracuse reveló que, a finales de septiembre de 2016, el último año fiscal de la administración Obama, el retraso ascendía a 516,031 casos, aproximadamente una sexta parte de lo que es ahora.
Los entonces 278 jueces de inmigración concluyeron un promedio de alrededor de 750 casos cada año. El promedio de casos asignados fue de 1,850 por juez.
El crecimiento de los pedidos pendientes se aceleró durante los años de Trump. En comparación con septiembre de 2016, el retraso creció dos veces y media en septiembre de 2020, hacia el final de la administración Trump. El número de jueces en ejercicio también había aumentado a 484, y el promedio de casos pendientes era de alrededor de 2,600 por juez.
La contratación de nuevos jueces se aceleró durante los primeros tres años de la administración Biden.
Los últimos registros de personal de la Oficina Ejecutiva para la Revisión de Casos de Inmigración (EOIR), muestran un total de 682 jueces de inmigración actualmente en ejercicio.
Además, cada juez cerró en promedio alrededor de 975 casos durante el último año fiscal. Se trata de una tasa de cierres casi un tercio mayor que hace siete años, durante el último año de la administración Obama.
Aun así, el mayor número de jueces y el mayor número de casos cerrados por juez todavía no han podido seguir el ritmo del flujo de casos entrantes. Por lo tanto, el número promedio de casos de los 682 jueces que actualmente están en ejercicio ha aumentado a 4,500 por juez.
El Independiente/Redacción Foto: EFE