Existe otro turismo en Quintana Roo, no sólo están las playas, este bello estado también tiene selvas a las que se le puede sacar mucho provecho, sostuvo Daniel Cota Tirado. “Creo que hay que voltear a ver a la selva, a la sustentabilidad, porque hay mucho que aprovechar de la naturaleza”, dijo al recibir la medalla de oro en la 3ra. Bienal de Arquitectura del Caribe Mexicano.
La obra “Glass House”, ubicada en la Ruta de los Cenotes de Puerto Morelos, fue galardonada con el oro; se entregaron también nueve menciones honoríficas y seis medallas de plata. En el concurso participaron 42 proyectos arquitectónicos asentados en Cancún, Chetumal, Riviera Maya, Cozumel y Tulum.
Carlos Ríos Castellanos, en representación del gobernador Carlos Joaquín González, entregó la distinción a Cota Tirado. “Glass House es una casa de cristal en medio de la selva maya con arquitectura vanguardista, seleccionada por el jurado calificador por su calidad, impacto, trascendencia social y aportación a la arquitectura”.
El funcionario, arquitecto de profesión y secretario de Desarrollo Territorial Urbano Sustentable del Estado, felicitó al ganador de la medalla dorada.
Sentirse orgullosos
Por su parte, el presidente de la Federación de Colegios de Arquitectos de la República Mexicana (Fcarm), Aldo Paul Ortega Molina, expresó que los arquitectos mexicanos deben sentirse orgullosos de lo que están haciendo. “Con nuestro trabajo diario estamos construyendo un mejor Quintana Roo y un mejor México”. Acotó que se debe ofrecer con este tipo de obras una mejor vida para las comunidades.
Agradeció la realización de la bienal a cargo del Colegio de Arquitectos de la Riviera Maya y la participación de los cuatro colegios de esos municipios, así como de Yucatán, Veracruz, Tabasco y Chiapas. Las clasificaciones participantes fueron: diseño de interiores; arquitectura sustentable; edificio vertical de uso mixto; vivienda multifamiliar; hotelería y vivienda familiar en proyectos y obras ubicadas en Cancún, Tulum y Puerto Madero.
Ríos Castellanos reconoció a la Fcarm y colegios por impulsar esta bienal que ayuda a promover y mostrar al mundo la arquitectura. “Para que vuelva a ser el motor que reduzca la brecha de la desigualdad y podamos retomar el culto a la vida”.