Luego de que la Organización Mundial de la Salud informó sobre la muerte de una persona en nuestro país a causa de la influenza aviar, la Secretaría de Salud aseguró que no existe ningún riesgo de contagio para la población, debido a que no hay una fuente identificada de infección.
La persona que falleció es un hombre de 59 años, con antecedente de enfermedad renal crónica, diabetes tipo 2, hipertensión arterial sistémica de larga evolución, residente en el Estado de México. Luego de varios días de síntomas, el 24 de abril se hospitalizó y el mismo día falleció en el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias “Ismael Cosío Villegas” (INER).
Indicó la dependencia que la muestra del paciente resultó positiva a influenza tipo A y no se identificó en primera instancia el tipo de influenza que padecía.
Esta muestra, inicialmente estudiada en el Laboratorio de Biología Molecular de Enfermedades Emergentes del Centro de Investigación en Enfermedades Infecciosas (Cieni) del INER, fue enviada al Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos (InDRE), confirmando la positividad a influenza de baja patogenicidad tipo A (H5N2).
Señaló que durante una investigación epidemiológica exhaustiva, todas las muestras de los contactos identificados han resultado negativas.
La Secretaría de Salud indicó que una vez identificado el caso de referencia, de inmediato, en el contexto de la estrategia Una Salud impulsada por la OMS, se implementaron las siguientes acciones:
En el grupo de Una Salud participan, por parte de la Secretaría de Salud, titulares o representantes del Comité Nacional para la Vigilancia Epidemiológica (Conave), del Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades (Cenaprece), Centro Operativo de Atención a Contingencias (Copac), Dirección General de Promoción de la Salud (DGPS), Centro Nacional para la Salud de la Infancia y Adolescencia (Censia), la Dirección General de Información en Salud (DGIS), Dirección General de Epidemiología (DGE-InDRE) y Centro Regulador de Urgencias Médicas (CRUM).
Por parte de Agricultura participa el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), y de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) colabora la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp).
Además, se incorpora la representación en México de la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
La OMS considera que el riesgo de salud pública de este virus para la población en general es bajo, por lo cual el consumo de carne de pollo o huevo bien cocidos no representa peligro para la salud del ser humano.
La influenza aviar es una enfermedad viral que afecta a las aves silvestres y domésticas; se encuentra de manera natural en las aves acuáticas; las bajas temperaturas y la humedad ambiental favorecen la supervivencia del virus, la cual se encuentra relacionada con las condiciones climáticas, es decir, la temperatura-ambiente.
Se realizó vigilancia epidemiológica exhaustiva en la zona de residencia de la persona contagiada para detectar algún posible caso de contagio en otra u otras personas. La influenza zoonótica es una enfermedad que puede transmitirse de aves u otros animales a los seres humanos. Hasta el momento no hay evidencia de transmisión de persona a persona.
En la actualidad, estos virus se mantienen en vigilancia para detectar cambios en su transmisión. El periodo de incubación de la influenza aviar en humanos suele ser mayor que el de la influenza estacional. La OMS recomienda un periodo de seguimiento por 14 días en casos sospechosos.
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