Rafael Pascual
Luego de la detención de Salomón Alfonso Muñoz (a) “Máffer” y de Oscar Solís Soberanis, señalados como presuntos responsables del homicidio de José Luis Corral Morales, la Fiscalía General del Estado (FGE) en coordinación con el operativo Fuerza de Tarea Interinstitucional de 100 Días, encabezada por la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSyPC) y Secretaría de Marina (Semar) cumplimentaron una histórica orden de cateo al interior del Sindicato de Taxistas “Andrés Quintana Roo” la noche de este lunes, en busca de indicios que comprueben sus vínculos con el crimen organizado.
Más de un centenar de elementos policiacos cerraron todos los accesos a las instalaciones del sindicato y la circulación de las calles aledañas como Ruta-4 y calle 71 fue restringido para que se realizara la diligencia judicial.
Se pudo conocer que el punto principal de revisión fueron las oficinas de Máffer y la de Oscar Solís, que es uno de los directivos de la empresa Transporte Terrestre Estatal (TTE), enfocándose a las computadoras y documentos.
De la misma manera, se revisaron muchas oficinas operativas más y de gente allegada a ambos detenidos, que tras haber cumplido con el protocolo judicial de certificación médica en las instalaciones de la FGE, fueron trasladados al Centro de Reinserción Social (Cereso) de Cancún.
Cabe destacar que el Sindicato de Taxistas “Andrés Quintana Roo” de Cancún, atraviesa por una de sus peores crisis en materia administrativa y operativa en muchos años, como un claro ejemplo del descuido, corrupción, impunidad y, sobre todo, tolerancia que han permitido sus dirigentes.
La incrustación de la delincuencia organizada ha sido un secreto a voces desde hace muchos años, lo que ha cobrado la vida de decenas de operadores, otros más han sido encarcelados, existen sitios controlados por grupos delictivos para la venta de drogas y el cobro de derecho de piso que ha ido en aumento en la zona centro, pero principalmente en la zona hotelera de Cancún.
Incluso, cuentan con un grupo operativo “de choque” encargado de la “cacería” de taxistas que no se cuadran con la gente que controla el gremio, así como para enfrentar a los Uber.
