El Economista/Jesús Vázquez
El sector empresarial de Cancún lanzó un llamado a no permitir que el semáforo epidemiológico siga descendiendo, pues consideran que está en riesgo la temporada alta de verano
El sector empresarial de Cancún lanzó un llamado a no permitir que el semáforo epidemiológico siga descendiendo, pues consideran que está en riesgo la temporada alta de verano.
“Si no contribuimos todos para que cambie el semáforo epidemiológico de naranja a amarillo no servirá de nada el periodo vacacional de mediados de año, porque estaremos totalmente limitados en los aforos”, comentó Iván Ferrat, presidente del Consejo Coordinador Empresarial del Caribe.
Los meses venideros, dijo, deben apuntar sólo hacia la recuperación económica porque las empresas locales siguen en una fase de recuperación de la cual no se pueden permitir “el lujo” de retroceder.
“Aunque se ve difícil, las empresas deben invertir en la aplicación de pruebas de antígeno a todo el personal que labora en el sector turismo para poder regresar cuanto antes al semáforo amarillo, de lo contrario todo el trabajo previo puede verse truncado”, insistió.
“Nadie tiene la respuesta exacta de esta pandemia, pero tenemos que reinventarnos, tenemos que hacer esfuerzos para conservar la salud de todos los colaboradores y de todos los ciudadanos”, concluyó el empresario.
Pese al incremento en los casos de Covid-19 en Quintana Roo, el sector hotelero anticipa que el verano tendrá ocupaciones por arriba de 60%, basado en las reservaciones que desde ahora comienzan a registrar en libros.
Roberto Cintrón Gómez, presidente de la Asociación de Hoteles de Cancún, Puerto Morelos e Isla Mujeres, comentó en entrevista previa que conforme avanza la vacunación en Estados Unidos se ha ido incrementando el interés de los estadounidenses por viajar, reflejado en el número de reservaciones con meses de anticipación, que es al mismo tiempo un nuevo comportamiento postpandemia, pues hasta antes de la crisis sanitaria el tiempo previo de reservación de un paquete vacacional se había reducido a una o dos semanas.