Aumentan denuncias por detenciones y deportaciones injustificadas por parte del Instituto Nacional de Migración en el Aeropuerto Internacional de Cancún, violando los derechos fundamentales de turistas.
En lo que va del año van 10 quejas ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos, en su mayoría porque supuestamente visitantes presentan papeles falsos.
De acuerdo con Miriam González, del Instituto para las Mujeres en la Migración, dijo que embajadas y asociaciones civiles también han recibido varias quejas por maltrato por parte del personal de migración hacia los pasajeros de vuelos internacionales, sobre todo de quienes proceden de países donde no hablan español o inglés, pues no cuentan con los mecanismos para verificar documentos en otros idiomas.
Muchas de las personas que intentan ingresar al país, principalmente de países en conflicto, son retenidas en las salas de migración y regresadas en el siguiente vuelo, lo que contradice la política migratoria de puertas abiertas plasmada en la Ley de Migración, sostiene.
Citó el caso que ocurrió el pasado 14 de octubre, cuando retuvieron a una familia de afganos que llegaron a México a pedir asilo y no les permitieron bajar del avión. Además de despojarlos de sus teléfonos celulares para que no pudieran tener comunicación con el exterior.
Ayer por la mañana, esta pareja regresó a la Ciudad de México para continuar su trámite ante la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados.
El jueves, el instituto negó el acceso al matrimonio —ella embarazada de 7 meses— por haber “incurrido en inconsistencias al no acreditar los motivos de su viaje”, pese a que pidieron el apoyo de refugio por el riesgo de permanecer en Afganistán tras el arribo del Talibán al gobierno. En instalaciones del INM del aeropuerto fueron obligados a permanecer al menos 24 horas y más tarde en Cancún durante la escala de deportación.
